Autor
Psicólogo Alejandro Rodríguez Matus.
Psicólogo Alejandro Rodríguez Matus.
Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, UNAM.
Co-Autor
Dr. Soriano PA.
Pharmed Solutions Institute
Artículo
Trastornos de alimentación
Los trastornos alimentarios se caracterizan por alteraciones graves de la conducta alimentaria. Son una problemática que aqueja hoy en día a la población mexicana, pero en especial a la juventud que es un grupo vulnerable a los bombardeos publicitarios. Como en todo existen siempre dos lados de la moneda así que los trastornos de la alimentación de los que se hablaran serán de la anorexia y la bulimia.
Teniendo como premisa que estas son de suma importancia y con consecuencias psicológicas, sociales, y en la salud de quien lo padece que pueden llegar a ser muy graves a corto o largo plazo si no se hace algo al respecto, es importante tener un conocimiento de estas enfermedades para un mejor tratamiento y recuperación de los pacientes.
"Los trastornos de la alimentación, sobre todo la anorexia y la bulimia, se presentan en la adolescencia como parte de la crisis del desarrollo, del crecer, del descubrirse". Así explica este fenómeno el psicoanalista y psiquiatra Armando Barriguete Meléndez
Del primero que se hablara es la anorexia nerviosa que se caracteriza por el rechazo a mantener el peso corporal en los valores mínimos normales, miedo intenso a ganar peso y una alteración de la percepción del cuerpo. Las personas que padecen de anorexia tienen una imagen distorsionada de su cuerpo es decir, se ven gordos, aun cuando presentan un estado de extrema delgadez, mientras mas flaca o flaco se este es lo mejor para la imagen publica.
También una de los criterios para diagnosticar este trastorno es la presencia de amenorrea (ausencia de al menos tres ciclos menstruales consecutivos) en las mujeres post-puberales. Mientras que en el CIE -10 tienen que tener todos estos síntomas pero en forma no leve.
"El miedo que experimentan hacia la obesidad los lleva hasta la inanición y a la pérdida progresiva de peso. Y lo más grave es que no tienen conciencia de su enfermedad", señala la nutrióloga Marcela Palma, del Instituto Nacional de la Nutrición Salvador Zubirán (INN). Los anoréxicos llegan a perder por lo menos el 15% de su peso corporal y, en casos extremos, hasta el 60%, lo que puede ocasionar la muerte.
Esta enfermedad en mayor cantidad se da en mujeres, y en especial en edades que van desde los 12 a 24 años de edad, pero esto solo es un promedio incluso se han llegado a saber de casos de niñas de 8 años. Una investigación del Instituto Nacional de Nutrición dice que estos trastornos afectan entre el 1% y el 5% de la población universitaria en los países desarrollados y que de esta cifra 95% son mujeres.
En la anorexia nerviosa se pueden distinguir algunos subtipos: Restrictivo, que describe cuadros clínicos en los que la pérdida de peso se consigue con dieta o ejercicio intenso, donde los pacientes con anorexia nerviosa no recurren a atracones ni purgas, mientras que otro tipo es el Compulsivo purgatorio que utiliza para identificar al individuo que recurre regularmente a atracones o purgas, algunos no presentan atracones pero si recurren a purgas incluso después de ingerir pequeñas cantidades de comida.
La palabra bulimia proviene del griego y significa "hambre de buey". Generalmente se presenta entre los 18 y 28 años de edad. Al igual que en la anorexia, el 95% de los pacientes bulímicos son mujeres.
Algunos de los factores precipitantes par esta enfermedad son: dietas, cambios corporales de la juventud, depresión, conflictos familiares, cambio de colegio, muerte de aun progenitor, matrimonio y primeros contactos sexuales. Todo esto lleva a un progresivo deterioro anímico, alteraciones cognitivas como una satisfacción a la perdida de peso, etc.
La bulimia nerviosa se caracteriza por episodios recurrentes de voracidad seguidos por conductas compensatorias inapropiadas como el vómito provocado, el abuso de fármacos laxantes y diuréticos u otros medicamentos, el ayuno o el ejercicio excesivo. Las personas que padecen de Bulimia, poseen una baja autoestima y sienten culpa por comer demasiado, por lo que presentan oscilaciones bruscas del peso corporal.
Algunos de los criterios que maneja el DSM-IV para esta enfermedad son las conductas compensatorias inapropiadas, repetitivas con el fin de no ganar de peso esto es al menos dos veces a la semana durante un período de tres meses. Una evaluación auto exagerada de su cuerpo.
Según datos del Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán (INN), en muchos países la frecuencia de la bulimia es mayor que la de la anorexia nerviosa, pero en México tampoco se tienen cifras sobre la incidencia de este trastorno, debido a que, aun cuando se han aplicado cuestionarios entre la población de riesgo, se esconden los síntomas.
Una característica esencial de la anorexia nerviosa y de la bulimia nerviosa es la alteración de la percepción de la forma y el peso corporales. Esta también se divide en tres que son purgativos, no purgativos (excesivo ejercicio) y atípicos.
Influenciados en gran medida por todo el bombardeo publicitario y de medios de comunicación masiva, las mujeres buscan obtener una concepción física parecida a las que se ven (modelos, actrices), sacrificando todo tipo de alimentos y generando en ellas estas alteraciones que pueden causarles la muerte.
Y en los hombre los modelos a seguir son los deportistas de alto rendimiento aunque estos solo buscan el físico sin saber de la preparación que estos deben tener para poder tener esos cuerpos. Todo lo anterior tiene que ver con la autoestima de los jóvenes y el quererse ver integrado a un grupo social. Algunas de las consecuencias de padecer este tipo de trastornos son: ansiedad, insomnio, aislamiento social, desinterés sexual, dificultad para concentrarse, alteraciones en el carácter como la ira, irritabilidad, agresividad. En la bulimia además están el abuso de alcohol y drogas y una gran necesidad de recibir la aprobación de los demás.
Los pacientes que padecen estos trastornos (anorexia o bulimia) requieren de un tratamiento multidisciplinario en el que debe participar un equipo de especialistas como psicólogos, médicos, nutriólogos etc.
El tratamiento para estas puede ser el siguiente:
· Fármacos: ansiolíticos y antipsicóticos
· Terapia nutricional: llevada por expertos en materia de nutrición y esto es para que se tenga un control de ingesta y lo que el cuerpo necesita en ese momento
· Terapia psicológica: modelos cognitivos conductuales, en cuanto a cambio de hábitos y modificación de ideas irracionales acerca de su cuerpo.
· Psicocirugía: esto se da solo en cuestiones extremas donde se pone en riesgo la vida del paciente y al hacer esto el paciente deje de tener esas ideas obsesivas y puede retomar su vida normal.
Pero sobre todo para que estos tratamientos tengan el éxito esperado se requiere del apoyo de la familia, del grupo, y sobre todo del mismo individuo en querer dejar atrás este trastorno.
Los padres deben de estar al pendiente de sus hijos que presenten este tipo de padecimiento, recordando que la prevención es la mejor forma de estar sanos, ya que después estas son difíciles para todos los que la padecen y a quienes los rodean. Así como también campañas en las escuelas u otros tipos de lugares donde se concentren los jóvenes
Referencias:
· Concepción Salcedo Meza “La adicción por la delgadez” recuperado de http://www.comoves.unam.mx/articulos/anorex.html
· Camila Boyero de Giménez “trastornos de la alimentación” recuperado de http://www.educar.org/articulos/bulimiayanorexia.asp
· Dr. Armando Barriguete Meléndez “La anorexia y la bulimia, ¿desafíos?” recuperado de http://www.comoves.unam.mx/articulos/anorex.html
· DSM-IV. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (versión electrónica)
